El Dr. James Wolf se está muriendo de cáncer de páncreas. Le quedan tan sólo tres meses de vida.
Su mayor preocupación es perderse los momentos
más importantes en la vida de sus hijos.
Un soleado sábado de julio, su hija Rachel, de 25 años, sorprendió a su padre con el día que siempre soñó, vestida de novia, con su maquillaje y sus invitados. Sólo faltaba el novio, pero eso no iba a impedir que ella sacara a su padre a bailar. Tuvo una idea para que su padre pudiera estar presente en su boda real: crear y grabar su propio baile de padre / hija. Este baile fue grabado para poder proyectarlo el día de su boda real.
Este emocionante momento tuvo lugar en Auburn Recreation Park en Auburn (California).
Una limusina se detuvo a las 7 de la tarde, y Rachel salió con un vestido blanco que brillaba en el sol de la tarde. El Dr. Wolf miró a los ojos a su hija diciendole:
"Hola cariño. ¡Qué guapa!"
A lo que ella respondió con un: "Gracias papá!".
Su abrazo se tragó toda la tristeza y conquistó todas las preocupaciones. Este vínculo aún no estaba listo para romperse, sobre todo antes de un último baile.
La canción elegida fue "Cinderella" de Steven Curtis Chapman. Todos los invitados, entre los que se encontraba Lauren, la hermana de Rachel, observaban como padre e hija se acercaban hacia la pista de baile. Uno de los médicos del Dr. Wolf le aconsejó que no debería hacer esfuerzos, pero él quiso continuar tras el baile con Rachel, y sacar a bailar a Lauren y a su esposa.
Esta celebración seguro que fue una noche que ninguno de los presentes jamás olvidará. El Dr. Wolf dijo:
"Cada día, tenemos una opción. Tenemos la opción de amar o no a esa persona que está frente a nosotros. Lo más importante en la vida son las relaciones que se construye a través de los años. Todo lo demás es una ilusión."
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